Thank You.

Hace más de un año descubrí ese gran procedimental que es The Closer y debo decir que hasta el día de hoy no me ha decepcionado. Esta serie muestra el trabajo de la subjefa de la Policia de Los Angeles Brenda Leigh Johnson, interpretada magistralmente por Kyra Sedgwick, que revoluciona desde su llegada la comisaria donde trabaja.

Trasladada desde su Atlanta natal, debe lidiar con un equipo de policías reacios a colaborar con ella y a estar bajo sus órdenes, ya que el cargo que ahora ocupa iba destinado a Taylor de homicidios. Pese a este contratiempo, caerán rendidos a sus pies ante la profesionalidad que destila y la maestría que tiene a la hora de hacer confesar a los asesinos y tunantes en cada episodio.

Lo grande de esta serie, amén de unos casos interesantes y que no suelen dejar indiferente, es el elenco de actores que bailan al son de Sedgwick y que son, junto con ella, los que hacen que The Closer brille cada día con más fuerza. Sin embargo la verdadera luz la trae su protagonista.

Kyra Sedgwick: A.K.A Brenda Leigh Johnson

Nacida y criada en Atlanta por Clay and Willie Ray Johnson, a los cuales también conocemos durante la serie conquistando a la audiencia nada más entrar en escena. Brenda se traslada, tras haber trabajado para la CIA, a Los Ángeles donde se reencuentra con un antiguo amante que ahora será su jefe.

Decidida y nada fácil de llevar, Brenda pone la nueva división de homicidios prioritarios patas arriba porque perder no entra en sus pensamientos. Despistada y con un amor desmesurado hacia todo lo que contenga azúcar, hace las delicias de todo aquel que la ve y es difícil no enamorarse de su personaje.

Trae consigo la educación sureña pero también la altivez y terquedad, por lo que trabajar a su lado no se convierte en un camino de rosas precisamente pese a dar las gracias a cada paso que da.

La vemos enamorarse y poner su trabajo por delante de ese amor y de quien se cruce en su camino, sin embargo pese a su edad, no es capaz de enfrentarse a su padre. Su gato Kitty se convierte en su gran compañía, digo gato pero es una gata a la que ella ve como macho, pese a dar a luz, y nunca cambiara de opinión.

Miedo a envejecer, a no ser demasiado buena, a que vean los defectos que tiene, Brenda esconde su verdadero yo tras una careta de autosuficiencia y dominio de la situación. Enamorada de su equipo, los defiende a capa y espada y se convierte en el líder indiscutible.

No es elegante, no viste bien, ni siquiera cambia de bolso pero Kyra Sedgwick es Brenda y no creo que ninguna otra actriz hubiera realizado mejor este papel para una serie que contiene dosis de acción, dulzura y buen humor y que si aún no has visto no deberías perderte. Thank you.

De dónde vengo y hacia dónde voy

Se dice, se rumorea y se comenta, que los patos somos animales que viven en parejas o grupos y que nos lamentamos cuando nuestros compañeros mueren. Que somos animales adaptados al agua, la tierra y el aire volando cientos de kilómetros cada año en nuestras migraciones.

Yo por el momento vivo a mi aire y ninguna pata me pone la susodicha encima y me pregunto quién ha sido el que tuvo la inspiración para decir que sufrimos cuando perdemos a nuestros compañeros. Lógico es que como seres vivos con corazón, padezcamos ante esta situación, no sé yo si estaría escuchando a Los del Río en ese momento al son de "Algo se muere en el alma..." y dijo: "ésta es la mía, hoy lo clavo, ¿a que van a sufrir los patos también?"

Hablan de lo sociables que somos y que disfrutamos estando con otros siendo muy meticulosos con nuestra limpieza, disfrutando cuando nos acicalamos las plumas extendiéndolas ante posibles parejas.

Primero y principal, a nadie le gusta estar solo y el que lo diga es para hacerse el interesante y guapo te pones y sacas pecho ante la pata que ves pasar y si me apuras hasta de la gallina, pero lo de la limpieza... éste no ha venido a mí nido un domingo.

Incluso se llega a comentar, que los patos empleamos el lenguaje corporal así como diversas vocalizaciones para comunicarnos e, incluso, se ha demostrado que dependiendo de la zona poseemos diferentes acentos.

Yo tiendo al andaluz pero no sé si es porque me lo pegó mi padre. Ahora bien, Cuack es Cuack que somos patos, y al estilo Pekín ya estamos muertos, por lo que nos entendemos sin problemas que no somos como los chinos y sus cientos de dialectos.

¿Por qué soy ojopato y no ojopez u ojolechuza? También me podrían haber llamado Manolo pero no. Mi madre decía que siempre estaba muy atento a todo lo que pasaba y que era el ojo que todo lo ve y así nací yo, Ojopato. Mira que majo era de pequeño.

Lo cierto es que por mucho que escriban sobre los patos, no han conocido la verdad y es que a los patos lo que nos gusta es retozar, pata arriba o pata abajo, mientras serieamos.

A mi amiga Rosita que vive en el lago de la Universidad le gusta venir a mi charca a ver todas las series que te puedas imaginar y nos lo pasamos de miedo, desde aquí la saludo porque fue ella quien me incitó a comenzar a escribir sobre lo que más me gusta.

En este blog pretendo dar mi opinión acerca de una de mis grandes aficiones a parte de nadar, volar y pegar picotazos a un chino o al gracioso que se come el foie. Espero que te guste y que tengas ganas de conocer algo más de este pato deslenguado.